Esta tarde, una vez más, me he dado una vuelta por Barcelona preparando futuras entradas; pero, finalmente, he acabado en la Pedrera donde pude ver la exposición: "L'art del menjar. De la natura morta a Ferran Adrià" en la que se analiza la relación entre el arte y la comida.
Ángeles me dio vía libre para que fuera a verla sin ella pues había visto algunas fotografías y le parecieron un poco repulsivas. Aunque yo la haya encontrado interesante, no voy a insistir en que vaya a verla, pues tiene parte de razón. Para no herir sensibilidades no voy a incluir ninguna fotografía que, por otro lado, pueden encontrarse fácilmente en Internet, pero comentaré que la muestra incluye desde un sillón hecho con chuletas de carne, hasta la mierda enlatada de artista, pasando por la obra conceptual de Joan Brossa "El invitado", en la que el garrote vil substituye la silla frente a una mesa perfectamente puesta, una metáfora de la última cena o el último deseo.
Sin embargo, la primera parte de la exposición, en la que se muestran pinturas de naturalezas muertas, contiene varios cuadros espectaculares, aunque yo me quedaré con un par que, curiosamente, tienen el pan como protagonista:
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| Pa i scacs. Salvador Dalí |
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| Naturaleza muerta con vaso de cerveza y panecillos. Johann Georg Hinz |
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